Siempre reiteramos lo mismo, y en esta ocasión no queremos dejar de hacerlo: el mejor momento del año para modificar las partes naturales de tu casa es el invierno. Y claro, a nadie le gusta estar poniendo la piscina cuando el calor es insoportable, o tener que quitar plantas con flores en primavera cuando están bien florecidas. En este caso, queremos mostrarte cuáles son las ventajas de considerar un arenero para el jardín.
Diversión asegurada con tu arenero para el jardín
Por supuesto, la idea de instalar un arenero para el jardín tiene mucho que ver con el uso que le demos a la parte de atrás de nuestra casa, ya que se trata de una propuesta mucho más aprovechable por quienes tienen niños pequeños que mascotas. Incluso, no es difícil que el arenero para el jardín lo hagamos nosotros mismos, ya que solo necesitamos maderas sin clavos ni astillas, clavos y arena fina y limpia que conviene comprar completamente nueva para evitar problemas.
Lo primero que debes hacer entonces es tomar las maderas, y si son de las que tienen clavos, o demás elementos que puedan ser de peligro, quitárselos, además de lijarlas si fuera necesario. Una vez que hayas hecho eso, las clavas en el piso determinando la forma del arenero, que claro está normalmente será rectangular o cuadrado, y si tienes niños muy pequeños puedes proteger las maderas con goma espuma de colores.
Si está en una zona muy expuesta a los cambios climáticos, será importante también que tu arenero para el jardín esté cubierto con algún barniz para maderas de exterior especialmente elegido del color que más te guste. Además, en muchos sitios se les hace un techo que debe sobresalir por todos los lados para asegurarnos de que, incluso cuando llueva de costado, el agua no llegará a caer sobre la arena, arruinándola poco a poco.
¿Has tenido alguna vez un arenero para el jardín?