Una de las películas que más me han llamado la atención, desde pequeña, es -La pequeña tienda de los horrores- y su gran planta carnívora… donde ésta necesitaba sangre para desarrollarse.
En la película la planta era de origen alienigena, pero en la vida real si existen tipos diferentes de plantas carnívoras!
Hoy dedicaremos este pequeño espacio para hablar sobre estas curiosas plantas que absorben los nutrientes necesarios, para su desarrollo, de insectos y artrópodos.
Estas plantas atraen a los insectos y los atrapan, para alimentarse de los nutrientes que estos les aportan a las propias plantas.
Normalmente este tipo de plantas suelen encontrarse en sitios que dispone de un suelo más bien pobre. El suelo suele tener carencia de nitrógeno y suelen crecer en áreas pantanosas y tierras ácidas. Por otro lado, también podemos verla en regiones tropicales cuyo hábitat es bastante húmedo.
A partir de su descubrimiento, gracias a algunos escritos de Darwin, a partir del 1875 han sido descubierta una 625 especies diferentes de plantas carnívoras.
Para atrapar a sus pequeñas víctimas, estas plantas disponen de diferentes tipos de.. trampas.. digamoslo así. Por ejemplo algunas especies disponene de pelos pegajosos, otras de vejigas de succión, cepos, cucuruchos… etc. Normalmente se suelen alimentar de pequeños insectos.
No suelen alimentarse de algo más grande como animales o aves, aunque en algunas especies podría pasar, que un roedor quedara atrabado, algunos gusanos o escorpiones.
Una vez que la víctima ha quedado entre las fauces de la planta, ésta comienza a estimular la secreción de jugos para desintegrarlo… podría pasar varios días hasta digerir.
Normalmente si estas plantas son cultivadas en el exterior, ellas sola son capaces de buscar alimento, a travès de los insectos. Si por el contrario lo hacemos en interior será mejor nutrirlas nosotros mismos a base de insectos. Recuerda que otro tipo de alimento puede llegar a matar a la planta.
Por último os contamos que necesitan agua de lluvia o destilada, la presencia del sol y temperaturas sobre los 20 grados centígrados para desarrollarse en condiciones.