¿Sabes cuidar a tus rosales? Hoy te traemos los trucos más importantes para que tus flores favoritas luzcan resplandecientes en el jardín.
Elección correcto del lugar
Uno de los puntos claves para el cuidado de los rosales es escoger una buena ubicación. Tengamos en cuenta que no solo será una manera de decorar el jardín, sino que además, ayudará a su correcto desarrollo.
No se deberán colocar los rosales en sitios en donde reciba sombra por largos períodos, los rosales necesitan de mucho sol para su crecimiento, especialmente en las primeras horas de la tarde. Las plantas no deben competir con otras plantas de un tamaño más grande ni deben ser colocadas debajo de árboles o rodeadas de paredes.
Cómo preparar el suelo para los rosales
El suelo en donde vayas a colocar un rosal deberá tener una textura media, un poco ácida y rica en nutrientes y humus. En el caso de que la tierra esté dura o tenga una bajo contenido de salitre, es aconsejable renovarla. Antes de empezar el proceso de plantación la tierra deberá estar bien preparada. Es aconsejable que al recibir las plantas estén sumergidas en aguas por 24 horas para recuperarlas de una posible deshidratación, de esta manera, volverá a su estado natural.
Para colocar la planta se tiene que marcar el lugar elegido y acondicionar la tierra. Los hoyos deberán tener unos 60 centímetros por 25 a 30 centímetros de profundidad. Si se va a realizar una bordura también se tendrá que cavar una zanja.
La tierra del fondo del hoyo no deberá presentarse ni dura ni compacta, así la planta no tendrá problemas de extender las raíces. La planta deberá ser apretada con mucho cuidado contra el fondo, y después se deberá mover la planta suavemente hacia arriba y terminar de rellenar el hoyo.
Es fundamental que se cubra totalmente las ramas con tierra arenosa o de mantillo, así no estará perjudicada por la acción del sol, las heladas y los vientos. Cuando se haya terminado la plantación se deberá regar abundantemente para que no se lleguen a formar burbujas o cámaras de aire entre la tierra y las raíces, si quedan estos espacios, la planta se enfermará con mayor facilidad.
El riego de los rosales
Los rosales deben ser regados apenas la tierra se seque, al menos una o dos veces a la semana, el riego deberá ser abundante para garantizarnos que el agua llegue a sus raíces. Si los riegos son muy espaciados o con poca cantidad de agua la planta se empezará a debilitar.
Cuándo abonar
Al terminar la plantación del rosal no será necesario que se utilice ningún abono en el hoyo, ya que las raíces son muy débiles y pueden estropearse o quemarse. El primer abono debe colocarse dos semanas después de que los rosales comiencen a brotar. El producto aconsejado para ese momento es un fertilizante nitrogenado.
El fertilizante se debe colocar separando el tronco sobre la superficie. Los expertos aconsejan repetir la operación al menos una vez al mes durante la primavera y el verano. Especialmente si notamos que la planta es débil.
En el invierno se puede usar un fertilizante químico compuesto por nitrógeno, fósforo y potasio. Otro buen fertilizante es el estiércol, por su fermentado previamente, y aplicado en otoño con una dosis de tres kilos por metro cuadrado.
Podar un rosal
La poda de los rosales deberán efectuarse todos los años al empezar el invierno. Se lleva a cabo en ese momento ya que la planta permanece en reposo. Gracias a la poda, la planta rejuvenecerá y se le dará la forma adecuada.
Gracias a una correcta poda la planta lucirá joven, vigorosa, sana y nos regalará las más bonitas flores. Durante la poda se deben quitar las ramas viejas y débiles, dejando solo tres o cuatro ramas de unos 15 centímetros.
La poda de formación permitirá mejorar el aspecto de la planta. Para este tipo de poda se deberá conocer la ubicación de las yemas y hacer los cortes de la rama, la yema se deberá quedar en el extremo superior, ya que de ella nacerá una nueva rama.
Recordemos quitar las flores secas durante la época de la floración o las rosas que van perdiendo sus pétalos, ya que así la planta no gastará sus energía y se prolongará la etapa de floración
Para muchas personas, una de las flores más bonitas son las rosas. Existen muchas variedades de rosas y muchas tonalidades (rojas, rosas, amarillas, e incluso negras y multicolores). Si bien esta planta necesita de más cuidados que otras, tampoco es imposible lograr tener grandes, sanos y bonitos rosales. Esperamos que las pautas que te dimos te sean de utilidad y que el cultivo de tus rosales se convierta en una tarea exitosa, gratificante.