El café es una de las bebidas más populares del mundo, y aunque evidentemente eso es algo que muchos de nosotros sabemos, tiene una serie de funciones prácticas en la vida del jardín que a veces pasan desapercibidas y que son señalables. Concretamente, en este apartado queremos enseñarte cuáles son los beneficios de utilizar el café para abonar algunas tus plantas.
Lo primero que debemos tener en cuenta cuando queramos utilizar esta bebida en nuestro jardín, es no descartar los granos con los que se prepara, sino mejor guardarlos, para aprender a usarlos como un abono natural, en el caso de aquellas plantas acidófilas, es decir, para aquellas que requieren de un suelo ácido para su óptimo desarrollo. Por eso es importante que estés seguro de a cuáles se lo estás arrojando.
Una vez superada esta etapa de acercamiento, debemos decir que son muchas las especies de plantas con flores que pueden verse beneficiadas, como rosas, arándanos, frutillas, azaleas, hortensias o rododendros; ya que a todas ellas el café les estará aportando elementos básicos para su vida, como nutrientes del la relevancia del potasio, magnesio y nitrógeno.
Si aún te estás preguntando cómo es posible preparar el abono, lo primero que debes tener en cuenta es que sólo necesitarás los granos de café descartados como materia prima. A eso le sumas un par de hojas de periódicos, y una bandeja para poder sostenerlos. Pones el papel sobre la fuente y esparces los granos hasta que estén secos. Luego los aplastas hasta formar una especie de polvo, y listo, todo está perfecto para ser usado.
Para que empiece a hacer efecto, tienes que ir vertiéndolo alrededor de la raíz de la misma plata, y remover un poco la tierra para que ésta vaya absorbiéndolo. De esta forma verás como, poco a poco, el rendimiento y crecimiento de cada una de tus plantas va mejorando.