Con la llegada del verano, es el momento de disfrutar al máximo de nuestro jardín, pero claro, para ello es necesario que dediquemos nuestro tiempo y esfuerzo para que esté cuidado como se merece. En este sentido, es importante cortar el césped, quitar las malas hierbas, recortar los setos y regarlo bien. Centrándonos en este último punto, hoy queremos hablar de algunos consejos que pueden venir muy bien a la hora de ahorrar agua en el cuidado del jardín, algo que nos vendrá muy bien para no malgastar este bien tan preciado. Si estáis interesados, seguir leyendo y descubrir estos sencillos consejos que hoy os traemos.
Riega siempre lo necesario
Hay plantas que requiere más cantidad de agua que otras debido a sus características. Así, regar poco no es la solución para reducir el consumo, ya que lo más probable es que las plantas terminen pasando a mejor vida. Una de las mejores soluciones, es colocar las plantas según sus necesidades, separando aquellas que necesitan más agua de las que necesitan menos, es decir, crear una zona húmeda, otra intermedia y otra seca. De esta forma, resultaría más fácil automatizar el riego y así ahorrar agua.
Utiliza agua de lluvia
Sabemos que no llueve mucho pero cuando lo hace, podemos aprovechar para recogerla en depósitos o cubos para después utilizarla para regar las plantas. El agua de lluvia es perfecta para esta práctica, por lo que os recomendamos que siempre tengáis algún depósito cerca de una bajante para recoger el agua que caiga del cielo.
Reduce la necesidad de riego
Otra opción que nos ayudará ahorrar en el consumo de agua, es reducir la necesidad de riego. Para ello, podemos crear un mantillo en la base de las plantas. Con esto lo que buscamos es que el agua tarde el mayor tiempo posible en evaporarse. Es una práctica muy utilizada por los jardinero profesionales, por lo que no debéis dejar de utilizarla en vuestros jardines.
Reutiliza el agua
Hay ocasiones en las que desperdiciamos gran cantidad de agua en casa. Por ejemplo, cuando esperamos la llegada del agua caliente. Esa agua la podríamos reutilizar para regar nuestras macetas, jardineras o cualquier otra parte del jardín. Eso sí, aseguraros de que no contiene ningún producto químico que pueda dañar las plantas.
No regar durante el día
En estos meses de verano, durante las horas diurnas, es normal alcanzar elevadas temperaturas que hace que el agua se evapore con mayor facilidad. Es importante realizar el riego a última hora del día o bien por la noche. De esta forma, evitaremos que la humedad se evapore y la planta pueda absorberla de forma natural.
Elegir el sistema de riego que mejor se adapte a vuestras plantas
Para cada tipo de planta, existe un sistema de riego que funciona mejor a la hora de ahorrar en agua. Entre los tipos que nos podemos encontrar están:
- Manguera o regadera: Ofrece una eficacia del 45% y está recomendado para ser utilizada en sitios pequeños o para regar macetas.
- Sistema de goteo: En este caso, se requiere de agua de buena calidad. Alcanza una eficiencia del 90% y es ideal para ser utilizado en árboles y arbustos.
- Aspersión: Requiere de una instalación de tuberías para que funcione de forma correcta. Alcanza una eficiencia del 75%. Produce un aumento de humedad relativa, lo que ayuda a desperdiciar menos agua. Resulta muy útil para jardines de gran tamaño.
¿Qué otros consejos pensáis que pueden ayudarnos a la hora de ahorrar en el consumo de agua? Animaros y compartir con todos nosotros vuestros comentarios. ¡Os estamos esperando!