El verano es una época muy especial del año para todas nuestras plantas, considerando que se trata de una etapa que deben superar necesariamente como para demostrar su capacidad de adaptación, sobre todo si han sido plantadas en primavera. Por este motivo, queremos enseñarte algunas cuestiones interesantes que debes tener en cuenta para cuidar tus hierbas en este momento de tanto calor.
Lo primero que puedes tener en cuenta, en este sentido, es que si tienes la necesidad de conservar las hierbas a una temperatura baja, el mejor truco es congelarlas en bandejas para cubitos de hielo. De esa forma, aunque pasen las semanas siempre tendrás hierbas en buen estado, bien frescas. La menta y la albahaca son muy buenas opciones en este sentido.
Si, en cambio, quieres obtener algún producto que resulte un poco más útil, puedes preparar jarabes, jaleas o mermeladas con tus hierbas. En la mayoría de los casos el procedimiento es bastante simple. Lo primero que debes hacer es hervir la hierba con un poco de azúcar y agua, en partes iguales, revolviendo hasta que la hierba se deshaga, y luego pasando por el colador.
En algunos casos en especial, otra muy buena alternativa que existe en este sentido es la de aprovechar tus hierbas es utilizando la técnica de secado para su uso posterior. Existen dos formas de secado, la primera de ellas en el microondas, que es menos natural pero desde luego más rápida, y la segunda colgando las hierbas al sol.
Finalmente, otras buenas opciones que puedes tener en cuenta tienen que ver con hacer mantequilla a partir de las hierbas, o hacer tu propio aceite de hierbas. La ventaja en cualquiera de los casos es que puedes obtener resultados muy provechosos sin hacer tanto esfuerzo como uno creería que es necesario, y pudiendo conservar las propiedades de las hierbas por más tiempo.
