Los cedros y los pinos forman un grupo de plantas vasculares con semillas. Se caracterizan por tener un origen muy diverso. En la época geológica fueron muy abundantes, actualmente se presentan en grupos más reducidos.
Se caracterizan por tener óvulos expuestos en hojas modificadas que protegen a la megaspora que se origina a partir del gameto femenino. En el grupo de los pinos y los cedros se pueden ver cipreses, sabinos, pinos, piñoneros, piñones, abetos, oyameles, ahuehuete.
Muchos conocen estos árboles como coníferas porque sus semillas se producen en conos. Son plantas leñosas que aparecieron en el planeta hace millones de años. En ese momento ya existían las mismas especies que en la actualidad. Cuentan con un alto valor económico que las convierten en un grupo muy importante y conocido.
En el mundo existen 575 especies diferentes, las familias más conocidas con: cipreses (Cupressaceae), pinos, abetos y hayarines (Pinaceae), podocarpos (Podocarpaceae), ahuehuete (Taxodiaceae) y el tejo (Taxaceae).
Las coníferas ocuparon importantes partes del mundo en el pasado, con el aumento progresivo de las temperaturas se fueron relegando a las partes más frías formando grandes bosques. Su distribución original se restringía a las zonas del norte de América, Europa y Asia. Algunas especies tienen una extensa y variable distribución geográfica.
Normalmente crecen juntas de tres a cinco especies de pinos en el mismo bosque. La altitud se vincula con la composición y la distribución de las especies de pino. Este tipo de árbol puede ser muy invasivo en los suelos minerales expuestos. Este tipo de suelo se ubica en las áreas montañosas de origen volcánico.
Dentro de este grupo los árboles son los más característicos, aunque también se pueden encontrar otras especies que cambian de forma en base a las condiciones de su hábitat. Las características más importantes son:
- Flores que se encuentran reducidas a sacos polínicos y óvulos con forma de conos.
- El polen germina directamente en las paredes del óvulo.
- No cuentan con vasos en la xilena y células acompañantes en el floema.
- Su fertilización es simple, su vehículo es el aire.
Foto | Flickr
