Los ficus son árboles excelentes para decorar nuestro jardín o nuestro hogar cuando aun están pequeños. Sin embargo, si bien se trata de un tipo de planta relativamente fácil de cuidar, aún son algo sensibles a contraer cierto tipo de enfermedades, por lo que en esta oportunidad te comentaremos cuáles son las enfermedades más frecuentes en los ficus.
Pérdida de la hoja
Cuando tu ficus comienza a perder hojas suele ser generalmente por un periodo de cambio de estación. No se trata de un signo de enfermedad, pero sí debes tener en cuenta que sí tiene que ver con un período de adaptación. Pues lo hacen cuando fueron movidos de maceta, a otra ubicación o cuando existen cambios en la temperatura o el riego.
Cuidado con los insectos
Los insectos son uno de los factores más comunes en las enfermedades de los ficus. Las cochinillas, los pulgones, los ácaros, otros insectos e incluso los hongos suelen infectar al árbol de manera de alterar su proceso natural de fotosíntesis. Ante esta situación, puedes eliminar cualquier enfermedad limpiando las hojas con un paño húmedo y si es un árbol al aire libre te recomendamos esparcir algún repelente de insectos para plantas.
Manchas en las hojas
Las manchas en las hojas se presentan en primera instancia como pequeñas manchas de humedad, pero con el tiempo van creciendo obteniendo un color marrón o amarillo. En ocasiones, suelen presentar puntos rojos y atacan a las hojas recién maduras. Para combatir este tipo de enfermedad, es conveniente el uso de productos anti-bacterianos y a su vez el uso de fertilizantes.
Antracnosis
Este tipo de enfermedad provoca en el ficus manchas en los bordes de color marrón y amarillo. Cuando la infección avanza, las hojas tienden a secarse y volverse marrones. Para controlar esta enfermedad, es conveniente mantener los niveles de agua y temperaturas de forma estable y a su vez, podar las hojas infectadas para evitar la expansión en el resto del árbol.
Fuente: e How en Español