Los hongos en el rosal son una problemática mucho más común de la que podríamos llegar a suponer, pues así como esta especie está llena de adeptos que aman sus colores y fragancias, la verdad es que también tiene detrás muchas plagas. En efecto, entre las enfermedades más comunes que aparecen en el rosal como consecuencia de los hongos, podemos mencionar algunas como la Mancha negra del rosal, el Mildiu o la Roya.
Algunos trucos para evitar los hongos en el rosal
Bien, si aún no tienes tu rosal en casa pero quieres cultivar uno pronto, el primer consejo que podemos darte es que te tomes la molestia de buscar especies de rosas que sean resistentes a los parásitos y hongos, que las hay. De hecho, los rosales tipo Arbustivos y Rosales Antiguos son una muy buena elección si ya hemos tenido malas experiencias antes con hongos en el rosal. Por supuesto, el drenaje correcto de la maceta, el riego, y el sol, son elementos fundamentales.
¿Y si ya la tengo cultivada?
Bien, si el problema de los hongos en el rosal ha aparecido en una planta que tienes desde hace tiempo, lo primero es corroborar el pH de la tierra o sustrato, que debe estar entre 5,5 y 6,5. Para bajarlo puedes usar sulfato de hierro en agua, y para subirlo, caliza molida. Luego debes echarle un ojo a la fertilización, ya que si falta o sobra es más probable que sufra enfermedades, e incluso puede ser una buena idea comprar un fertilizante específico para rosas en el mercado.
Luego la poda depende del tipo de rosal que tengas en casa, aunque en la mayoría de los casos no recomendamos mojar las hojas y mucho menos dejarlas mojada por una cantidad de tiempo larga, porque eso produce la aparición de hongos en el rosal. Por supuesto, si aún no eres víctima de este problema debes revisar de vez en cuando la presencia de hongos, y en esta época del año, es mejor que quites todas las hojas que hayan caído durante el otoño, pues pueden poseer esporas de hongos que infectarán en primavera.
¿Te han servido estos consejos para evitar los hongos en el rosal?
