Las tendencias decorativas, al momento de reformar un espacio y hasta de construcciones nuevas son innovadoras y avanzan mezclando belleza y funcionalidad. Dentro de esos nuevos materiales que ahora se utilizan en muchas más situaciones que antes está el microcemento, utilizado comúnmente como revestimiento de suelos interiores.
A menudo comparado con el hormigón pulido -sin ser exactamente lo mismo-, los suelos de microcemento suponen un paso adelante en la creación de espacios de calidad, durables y hermosos, con una facilidad de diseño y ejecución de obras que también pudiera señalarse como una ventaja, ya que en comparación con el tiempo que se tomaría colocar otro tipo de revestimiento, los suelos hechos con microcemento son fáciles de instalar.
Más allá de eso, existen otras ventajas que pueden señalarse:
Alta resistencia
Si se habla de la resistencia medida en años funcionando en óptima manera, el microcemento es un material ideal para realizar el suelo o renovar el existente. Si, en cambio, se habla de una forma más específica del microcemento y su resistencia, tendría que hacerse hincapié en diferentes aspectos técnicos del material:
- Es un material continuo, que se instala en una única pieza, sin uniones, y eso permite crear un suelo que no tiene fugas, que no da paso a la humedad o filtraciones.
- Por lo anterior, y por ser un material compuesto por diferentes resinas y derivados del cemento, no necesita la instalación de juntas -como sucede con la madera-. Así, el suelo se mantiene inalterable ante cambios de temperatura, humedad o hasta movimientos tectónicos.
- Soporta el desgaste por uso excesivo sin apenas notarlo en su superficie.
Capacidad de personalización
Personalizar el microcemento para utilizarlo como revestimiento de suelos es tan sencillo como agregar pigmentos de los colores deseados antes de su vaciado en el espacio final.
Desde luego, todo eso dependerá de la empresa elegida para llevar a cabo el proyecto, de la experiencia de la misma y el abanico de posibilidades que maneje, pero en la actualidad la mayoría de los suelos de microcemento se pueden variar en acabados, para que den la impresión de ser otro material -cuarzo, mármol, granito- o tener otra tonalidad, más allá del blanco o gris como se les suele encontrar por defecto.
Pulcritud
Hay un detalle que casi nunca se menciona sobre los suelos realizados con microcemento, y es el detalle de la pulcritud. Pero no una pulcritud asociada únicamente a lo fácil que es limpiar un suelo de este tipo, sino desde un concepto mucho más profundo e integral.
Por ejemplo, en ambientes o construcciones con un enfoque minimalista -por razones de estilo o por necesidades de espacio-, los suelos de microcemento son los protagonistas absolutos por brindar una sensación de unión con el resto de los espacios, pero sin ser nunca un elemento discordante o que distorsione el espacio, dando sensaciones de calidez que acaban por hacer el espacio mucho menos grande desde una perspectiva meramente óptica, lo que genera una pulcritud de diseño y espacio innovadora.
Y sí, también está el hecho de que es un material que apenas sufre desgaste, incluso cuando accidentalmente caen químicos o líquidos corrosivos sobre él, lo que se limpia pasando un trapo húmedo y no dejará ningún tipo de marcas.
Precio y durabilidad
Los suelos de microcemento tienen precios con un rango bastante amplio, porque además del material y su tratamiento tiene que ver la mano de obra, el traslado y otros costes indirectos, y muchas veces el coste propio de la instalación será similar o incluso superior a otros materiales.
Sin embargo, el secreto de la popularidad del microcemento como revestimiento para suelos está en la durabilidad que tiene -que se mide en décadas-, en la no necesidad de mantenimiento ni cuidados especiales más allá de una limpieza ocasional, en no necesitar tratamientos previos o instalaciones para mantener sus propiedades técnicas, y en soportar muy bien las altas exigencias, por lo que además se puede colocar en exteriores, y cuando todo eso se valora, la relación entre precio y calidad obtenida acaba por convertirlo en uno de los mejores materiales para incorporar a una casa, nave industrial o edificio de oficinas.