El jardín es un espacio de la casa que ha jugado ya papeles importantes incluso en el mundo de la literatura. La novela «Elizabeth y su jardín alemán» es sólo una pequeña muestra de ello. Todo lo que la protagonista de este libro necesita es su jardín, sus libros y sus hijas. Aunque el comprador no haya leído esta novela, puede presuponer por su título que Elizabeth, aparte de tener plantas con y sin flores por todos lados, tendría también (como mínimo) alguna que otra caseta de jardín y varias tumbonas de jardín en las que poder reclinarse en las horas en que el sol declina.
¿Qué tener en cuenta para escoger caseta?
A la hora de escoger casetas para jardín, conviene tener en cuenta la funcionalidad y el estilo que mejor combina con el resto de nuestra casa.El principal factor que influye a la hora de escoger una caseta u otra es el material. La madera, el metal y la resina son los tres candidatos más habituales. Cada uno de estos materiales cuenta con unas ventajas y también, unos inconvenientes que pueden favorecer o perjudicar nuestro jardín. A continuación, te explicamos las virtudes y los defectos, para que como comprador, valores cuál te resulta más conveniente.
Madera
La madera es el material clásico por excelencia. Sus propiedades como aislante térmico permiten que en el invierno, los ítems albergados en el interior de la caseta de jardín se mantengan en buenas condiciones. Del mismo modo, si alguien hace un uso activo de la caseta, no como cobertizo, sino como una prolongación de la casa, quien se encuentre en su interior permanecerá resguardado del calor del exterior. Se recomienda que se aplique un barniz exterior con el que poder aumentar la resistencia de la caseta y reforzar su impermeabilidad. Supone una alternativa medioambientalmente respetuosa. Admite la decoración externa e interna, con pintura, cúpulas, toldos, estantes… Eso sí, es conveniente aplicarle un tratamiento periódico que la proteja de la humedad y del agua. Además, precisan de un soporte, un suelo, que la aísle del terreno.
Metal
Se caracterizan por ser casetas de jardín resistentes, duraderas, que enfrentan bien las adversidades del tiempo. Su durabilidad es frente a humedades, vientos, altas y bajas temperaturas. En cuanto al coste, son bastante económicas, ya que su producción no supone un gasto tan elevado. Al ser ligeras, son más fáciles de transportar. La instalación es más sencilla a las casetas de madera. En cuanto a la limpieza, para mantenerla higienizada basta con utilizar una manguera, ya que es un material que se ensucia poco y que, en caso de hacerlo, repele bastante bien la suciedad. No pueden pintarse de cualquier color, sino que normalmente se venden en una gama predeterminada por el catálogo. Tampoco incluyen suelo, pero sí se ofrecen galvanizadas (lo que aumenta su resistencia).
Resina
Las casetas de resina son ligeras, igual que las de metal. Su ensamblaje es tan sencillo que se recomienda especialmente para quienes son más inexpertos. Son resistentes a la humedad, pero no transpiran, por lo que retienen el calor, algo que las puede hacer poco recomendables para el verano (convirtiéndolas en una especie de caseta útil únicamente como trastero). Al ser tan ligeras, son muy frágiles. Sin embargo, ofrecen estéticamente una gran virtud y es que pueden pintarse de muchísimos colores diferentes, además de que pueden imitar ciertas texturas: la de la madera y otros materiales.
¿Qué tener en cuenta para escoger tumbona?
Siguiendo con los materiales, las tumbonas pueden ser:
- Tumbonas de madera: Dotan al jardín de un toque rústico y orgánico. Son medioambientalmente respetuosas, aunque requieren de bastante mantenimiento, para evitar que la madera se estropee. No son nada ligeras, con lo que conviene descartarlas si se busca una tumbona portátil. No obstante, también las hay con ruedas.
- Tumbonas de plástico: Son más económicas que las de madera, ligeras y con un mantenimiento muy sencillo. Sin embargo, su durabilidad es menor. Entre los plásticos más utilizados se halla el polipropileno. Este plástico es de mayor durabilidad que los otros y reciclable.
Tumbonas que combinan varios materiales: Las hay que se fabrican con estructura base de aluminio, al que se le añade polipropileno y se refuerza con fibra de vidrio. De este modo se aprovechan las virtudes de cada material.