Aunque no muchos los tienen en cuenta, una de las expresiones de jardinería que más ha crecido en los últimos tiempos es sin dudas la que se lleva a cabo en las terrazas y balcones, y por eso, si estás interesado en llevar adelante este tipo de iniciativa, es que queremos mostrarte algunos consejos que entendemos pueden serte de suma utilidad.
Lo primero que deberás tener en cuenta tiene que ver directamente con el calor. Aunque no lo hayas pensado antes, cuando tenemos un calor seco, puede no ser necesario regar demasiado, y puede bastar con pulverizar con agua por la mañana temprano o al atardecer sin mojar las flores. Sin embargo, ante el calor húmedo puede que tengas que regar un poco más.
Por otro lado, el viento suele ser una complicación siempre en estos casos, y nuestra recomendación es que apuestes por proteger del viento todas las plantas que puedas. Esto, si bien abarca a la mayoría de ellas, resulta sobre todo importante con las que pueden resultar más delicadas, como las que están recién plantadas, o también las más pequeñas.
Volviendo al riego, esta vez en cuando a las macetas, conviene que consideres que si la maceta es pequeña, se seca antes. Una buena opción que tenemos en estos casos tiene que ver con analizar cómo está de húmedo el sustrato hincando los dedos. De acuerdo a lo húmedo y sucios que salgan, como ya lo hemos mencionado, sabremos si es necesario seguir regando o no.
En cuanto al abono, nuestra recomendación es que apuestes por echar un poco de abono líquido cada dos semanas. A la hora de la poda, siempre es mejor que podes luego de que pase la época de las floraciones, y para culminar, recuerda que los cambios de macetas deben realizarse cada uno o dos años dependiendo la especie de planta.