Aprender a cultivar tus propios tomates es una experiencia muy satisfactoria. Tu producción de tomates tendrá mucho mejor sabor que el de las verdulerías con el valor adicionado de comer lo que cultivas, sin pesticidas ni sustancias peligrosas. Y por eso con las bajas temperaturas queremos enseñarte a cultivar tomates de invernadero en invierno.
Pasos para cultivar tomates de invernadero
- Prepara una buena mezcla de tierra, con un agregado del 10% de abono de lombrices: la tierra para macetas estándar suele tener partes iguales de perlita, vermiculita y turba y se ajusta al pH adecuado añadiendo una cucharadita de cal hidratada por cada galón de mezcla de tierra. La cal es una buena fuente de calcio que previene la putrefacción. Humedece la mezcla inicial usando agua corriente y algún preparado específico.
- Haz germinar tus semillas: empieza con macetas pequeñas para que las semillas germinen. Colócalas en unos 5 a 7 cm de tierra y cúbrelas para evitar que la tierra se seque. Las semillas de tomate germinan a los 26 grados. Podrás ver el avance entre el día 5 al 18. Las pequeñas plantas deben ponerse entre 10 y 15 cm de una luz fluorescente.
- Mantén los tomates bajo 2 o 3 luces fluorescentes de 18 a 24 horas: la temperatura ideal para el crecimiento del tomate durante el día es de 21 a 24 grados y de 18 a 20 en las noches. Cuando las plantas hayan llegado a los 30 cm, necesitas moverlos a una maceta de unos 4 litros de capacidad. Tus plantas estarán listas para producir en unas 6 a 8 semanas.
- Los tomates florecen: entre 60 a 80 días desde el momento en que empiezas el proceso de cultivo. Al mismo tiempo, puedes realizar el último transplante a macetas de 11 litros de capacidad. Por las primeras dos semanas, aliméntalas con fertilizantes 10-52-70 o alguno similar.
- Poliniza las flores cada día mientras este húmedo y tibio: idealmente la humedad será del 65 al 70 por ciento. En un invernadero esto se logra más o menos entre las 11:30 am a 12:30 pm. La flor del tomate es la clásica con el estambre y el pistilo expuestos de forma visible. El problema de cultivar tomates de invernadero en invierno es que necesitan una cierta cantidad de vibración para poder liberar el polen.
¿Has podido ccultivar tomates de invernadero en invierno con estos trucos?
