La imagen del muérdago en Navidad es todo un clásico de esta época del año, y aunque sabemos que normalmente su significado tiene que ver con darse besos cuando pasamos por debajo, también a nivel jardinería hay otros elementos a tener en cuenta. De esa forma, vamos a analizar a continuación algunas de las principales características de esta planta, y por qué con el correr del tiempo se le han otorgado estas creencias.
¿Qué sabemos del muérdago en Navidad?
Lo primero que se debe mencionar acerca del muérdago en Navidad es que esta planta, denominada científicamente “Viscum album” es un arbusto clásico de color más bien verde, que puede medir hasta un metro de altura, que semiparásita de troncos y ramas de los árboles, y que en la naturaleza se encuentra muchas veces cerca de otras especies bien determinadas entre las que podemos mencionar por ejemplo robles, encinas y álamos.
Con las bayas como el fruto del muérdago en Navidad, podemos encontrarnos con que las primeras atribuciones de creencias le llegaron por parte de los druidas celtas, que realizaban ceremonias acompañándola con robles. Con el paso del tiempo, comenzó a pensarse que el muérdago en Navidad tenía que ver con augurios de los más positivos, como por ejemplo sobre la suerte, el amor, y mucho más específicamente la fertilidad, y por eso la tradición de los besos al pasarle por debajo.
Sobre todo en los países nórdicos, el muérdago en Navidad sigue siendo un elemento tradicional de esta época del año, y aunque curiosamente algunos pocos países le consideran como un elemento de mala suerte, son muchos los pícaros que se siguen aprovechando para sacarle besos a las chicas en las fiestas aprovechando su presencia encima de alguna puerta o abertura en particular, y quién puede decir que no mejora cualquier fiesta con un poco de muérdago.
¿Sueles decorar tu casa con muérdago en Navidad?