Si eres una de las muchas personas que ha apostado por poner sus plantas en macetas, ya sea porque tienes poco lugar en tu casa para plantarlas en la tierra, porque te gustan más así, o porque de este modo te es más sencillo cuidarlas, a continuación te serán interesantes estos consejos, que tienen a mostrarte cuáles son los momentos, o los síntomas, que nos indican que una planta debe ser removida de su maceta a otra.
Por ejemplo, una de las señas inequívocas de que una planta necesita ser removida, es el hecho de que las raíces comiencen a intentar salir, o de hecho lo hagan, por los agujeros de drenaje de la maceta, lo que nos estará indicando que el tamaño del recipiente se ha quedado chico para el crecimiento de la planta. El mismo caso se produce, de hecho, cuando vemos que las raíces aparecen en la superficie de la tierra.
En otros casos podrás notar, también, que las raíces forman una especie de bola, compacta y enredada, la cual comienza a perder el destino, por lo que algunas de ellas dejan de crecer, otras lo hacen de forma desproporcionada, y con el correr del tiempo es muy probable que la planta muera, de forma tal que también en este caso conviene buscar un recipiente de mayor tamaño.
Por todos los motivos anteriormente mencionados, como es una posibilidad realmente probable, el hecho de que la planta haya crecido lo suficiente para requerir un cambio de maceta, te recomendamos que las cambies a una que sea lo suficientemente grande en relación a la anterior, para de esa forma despreocuparte en este sentido por algún tiempo.
Ahora bien, por otro lado podría suceder que el florecimiento de tu planta se vuelva más bien escaso, o inexistente, de forma tal que las hojas sean demasiado pequeñas, o también defectuosas. En este caso, no es necesariamente que la maceta se quede pequeña, sino que está creciendo de una forma en la que no debe hacerlo, así que igualmente te recomendamos, o bien que lo trasplantes correctamente a una de igual tamaño, o si crees que ya no crecerá más, a la misma maceta.