Las enfermedades del césped son muchas, continuaremos hablando de ellas.
Pitium puede afectar a diferentes especies, en especial cuando se encuentran en la fase de germinación. En especial ataca a Agrostis stolonifera, Ray grass, Cynodon dactylon.
Entre los síntomas más comunes encontramos: en el césped recién sembrado o en las plantas que acaban de nacer se pueden ver algunas manchitas de color oscuro que se terminan pudriendo. Esto se genera por los hongos que se encuentran en el suelo. El resultado normalmente la muerte de las plántulas. Las infecciones se ven favorecidas por los encharcamientos.
En los céspedes que ya se encuentran establecidas o arraigadas se presentan diferentes síntomas. En este caso aparecen manchas con apariencia grasosa de 1 a 30 centímetros irregulares. A menudo se van uniendo entre si generando que la plana se seque.
Algunas condiciones son las que favorecen a la enfermedad. Estas enfermedades pueden atacar más durante el verano, cuado se superan los 30 grados de temperatura, cuando la hoja está húmeda y el terreno se encuentra mal drenado. Es raro que esto suceda en primavera o en otoño.
Otra enfermedad que afecta al césped es el hilo rojo o Corticium fuciforme. Todas las especies son sensibles a esta enfermedad, en especial la Agrostis y la Festucas.
La enfermedad es muy fácil de reconocer: aparecen algunas manchas de 5 a 20 centímetros de diámetro, muy parecidas a la de la enfermedad (antes mencionada) mancha de dólar) pero con una secreción gelatinosa filamentosa de color rojo, con el paso de los días las hojas se van poniendo marrones y acaban por secarse. Cabe destacar que la enfermedad se extiende rápidamente.
Como sucede en todos los casos, son varias las condiciones que favorecen su rápido desarrollo. Esta enfermedad puede aparecer durante casi todo el año, salvo en las épocas de heladas o sequía. Las temperaturas idóneas para el desarrollo van de los 18 a los 20 grados. Puede aparecer luego de las extensas lluvias.
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