Si quieres fabricar un compost deberás juntar los residuos de origen vegetal que queden en el jardín y en el hogar, en lugar de tirarlos a la basura. Este compost es un excelente abono orgánico que ayudará a mejorar la tierra de tu jardín y que las plantas obtengan mejores nutrientes.
La importancia del compost
Los expertos en la materia consideran que por cada 100 kilos de restos orgánicos se llegan a conseguir unos 30 kilos de abono, una excelente forma de ahorrar dinero en la compra de fertilizantes, además de ser naturales y libres de químicos.
Verás que su realización se vuelve una tarea simple, gratificante, con la cual ayudarás al planeta. Si estas pensando en crear uno anímate, verás que los resultados son muy buenos.
Materiales necesarios para la creación de un compost
Existen diferentes materiales que se pueden usar a la hora de crear un compost, lo más básico consiste en colocar en un rincón de tu jardín algunos listones de madera, formando una especie de gran macetero. Otra muy buena opción es, directamente, comprar un compostador prefabricado. En las tiendas especializadas podrás conseguir composteras en diferentes materiales como resina, plástico, composteras térmicas. Se comercializan en diferentes tamaños, entre los cuales conseguirás el ideal para cubrir tus necesidades.
Cuando vayas a elegir el tamaño recuerda elegir uno que sea algo más grande de lo que tenías pensado, es mejor que sobre lugar y no que falte.
En este caso se tiene que tener en cuenta la cantidad de personas que viven en la casa, el tamaño del huerto o del jardín, si tienes árboles de hojas caducas, si hay césped, etc. También se podrá evaluar la cantidad de verduras y frutas que se consumen.
Además de necesitar los listones de madera para su creación o una compostera prefabricada necesitarás una herramienta que te permita dar vuelta lo acumulado, tijeras para cortar las ramas y una pala, con la cual extraerás el compost que esté hecho. Una herramienta opcional es la máquina biotrituradora para las ramas gruesas que no puedes cortar usando una tijera. Si los restos y los vegetales que colocas en la compostera se encuentran triturados el proceso de descomposición será más rápido.
En qué lugar debo colocar el compostador
Es necesario que dejes reposar los componentes sobre la tierra, lo ideal es escoger, por comodidad, un sitio que no esté muy lejos de la cocina. Si puede estar en la sombra mejor aún, en el caso de que esté en el sol necesitará un riego mucho más frecuente para que no pierda su humedad y se descomponga rápidamente.
Residuos que se pueden colocar en el compostador o compostera
Residuos que se obtienen del jardín: césped, hojas de árboles y plantas, ramas podadas, hortalizas, serrín, etc. También podrás colocar malas hierbas que no tengan semillas, ya que las perennes, las plantas con bulbos o los rizomas pueden brotar.
Residuos provenientes del hogar: cenizas, resto del café y té, infusiones con papel incluido, cáscara de huevo, verduras, frutas, yogures caducados, corchos, papel de cocina, pelos, aceite de aliñar, etc.
Cosas que no debes colocar en el compostador o compostera
Existen algunos residuos que nunca debes colocar en tu compostador ya que en su descomposición podrán provocar olores desagradables, algunos de estos productos son la carne, los huesos y el pescado.
Evita echar plantas o ramas que estén enfermas, vegetales podridos, excrementos de animales domésticos (ya que tienen patógenos). Cenizas o serrín de madera tratada o aglomerados, maderas pintadas con barnices (es muy tóxico). Y, obviamente, no se deberán colocar deshechos que no sean biodebradables u orgánicos.
Qué sucede dentro de un compostador
Al colocar los residuos orgánicos y biodegradables en este compostador se empezarán a descomponer por la acción de las bacterias y de los hongos. Después de descomponerse fermentarán y se transformarán en otro material con características muy diferente, un material que será beneficioso para las plantas y para el suelo.
Lo ideal es hacer una capa inferior con las ramas más gruesas y piñas, esta capa no deberá ser de más de 30 centímetros.
Después se tendrán que crear varias capas mezclando residuos de corteza con hierba, poda de tallos papel cortado el mantillo o el estiércol del año anterior servirá como activador de la fermentación, se puede agregar alternando en distintas capas.
Cuando ya este formado es fundamental regar. El riego deberá hacerse frecuentemente, especialmente en zonas de climas secos. Ten en cuenta que los compostadores deberán tener ventilación y aberturas que ayuden en la descomposición Nunca deberán ser sitios cerrados de manera hermética.
Para acelerar la fermentación podrás pasar los residuos por una máquina trituradora o colocar activadores de compostaje (se venden en tiendas de insumos para jardinería). Otra buena medida es agregar lombrices.
Esperamos que estos consejos hayan sido de utilidad y te animes a crear un espacio destinado a un compostador o compostera. Después de tres a seis meses podrás comenzar a usar el material, que tendrá que tener un color marrón o negro, además deberá estar frío como consecuencia de la falta de actividad microbiana.
El compost que obtengas lo podrás aplicar en el suelo, especialmente en otoño. Podrás crear una capa de 5 centímetros.